Por Alfredo Guevara
La venta de pirotecnia o productos elaborados con pólvora, utilizados desde inicios de diciembre para despedir el 2024 y recibir el año nuevo tendrán especial vigilancia, toda vez que no se descarta la comercialización ilegal, adelantó Luis Gerardo González de la Fuente.
El Coordinador de Protección Civil del Gobierno del Estado, confirmó haber iniciado pláticas con personas que se dedican a la producción de ese tipo de artefactos explosivos, a efecto de capacitarlos y en la medida de lo posible reducir riesgos por mala manipulación o uso inadecuado.
Comentó que en todo el Estado hay por lo menos 15 personas que se dedican a la elaboración y comercialización de todo tipo de artefactos explosivos, algunos de ellos en la Capital del Estado, en el municipio de Mante y la zona norte de Tamaulipas.
Adelantó que conforme a la calendarización de las actividades de prevención, en materia de Protección Civil además de proporcionar capacitación a los vendedores que generalmente cuentan con permiso autorizado por la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), se revisarán puntos de venta, centros de almacenaje y fabricación.
“Cerca del inicio de la venta empezaremos con la capacitación para toda la gente que vende cuetes y que están establecidos legalmente, la capacitación este relacionada con el uso de extintores, manejo de dispositivos para contener fuego como agua y tierra y que cuenten con sus permisos”, explicó.
Recordó que dentro del marco legal, primero se solicitan los permisos y la Sedena como Protección Civil realizan sus dictámenes y se da respuesta a quienes comercializan ese tipo de productos.
No obstante, supo reconocer que “la gente busca la forma de vender ilegalmente los cohetes; el año pasado, en operativos conjuntos entre Protección Civil, la Guardia Estatal, Sedena se decomisaron cerca de quince kilos de pirotecnia pero no se pudo detener a los responsables de la venta pues lograron huir dejando los productos abandonados”, comentó Gerardo de la Fuente.
La idea es que en este año, antes de que inicie la venta de ese tipo de productos, se revisen las condiciones de los lugares en donde se elaboran y de paso, evitar que los comercialicen en la vía pública.