Por Alfredo Guevara
Las elevadas temperaturas y la prolongada ausencia de precipitaciones pluviales, hasta antes de la tormenta tropical Alberto, disminuyeron los rendimientos de la producción de sorgo en las siembras de temporal del norte de Tamaulipas, admitió Agustín Hernández Cardona.
El presidente de la Unión Agrícola Regional del Norte de Tamaulipas (UARNT), explicó que aún sin definir en qué cantidad, el rendimiento por hectárea sembrada se vino abajo en cuanto a kilos, al no generarse condiciones para el desarrollo vegetativo de la planta de enero a mayo.
De acuerdo a las perspectivas de los productores en la zona norte y valorando las condiciones que imperaron en la mayor parte del ciclo de siembras otoño-invierno 2023-2024, solamente se alcanzaría a cosechar alrededor de un millón 500 mil toneladas de sorgo.
“Es decir, tendría una baja de por lo menos un 25 por ciento, si se toma en cuenta que lo proyectado para cosecha de este ciclo era de un promedio de dos millones de toneladas, pero de acuerdo a las condiciones que imperaron en el campo, podría llegar a un millón 500 mil o menos”, sostuvo.
A estas alturas del mes de junio, consideró que la mayor parte de la superficie de la producción de sorgo en el norte de Tamaulipas se levantó por parte de los productores, y lo que resta es mínimo a levantarse en un par de semanas, cuando mejoren las condiciones para el ingreso de las trilladoras.
De hecho, la semana anterior los productores de sorgo se dieron a la tarea de realizar un trabajo de tendido, con la esperanza de poder cosechar lo más que se pudiera, antes de que se registraran las precipitaciones pluviales que dejó a su paso la primera tormenta tropical Alberto de la temporada de huracanes.
“Los compañeros anduvieron tendidos la semana pasada, antes de que se registraran las lluvias para cosechar lo más que se pudiera en las tierras de Matamoros, Valle Hermoso, Río Bravo, entre otros lugares donde se siembra este cultivo”, indicó.
Tras las lluvias, convino en la necesidad de hacer una evaluación para conocer en qué condiciones quedó el sorgo que no alcanzó a levantarse en esa región, en aras de que se recupere y no represente una pérdida, ahora por exceso de humedad, a quienes se dedican a esta actividad.