Por: Arnoldo García 

* Grupo de migrantes es concentrado en estadio habilitado como albergue

El Centro de Atención a Migrantes en Matamoros comenzó a funcionar con 143 migrantes deportados, esta madrugada. Personal del Instituto Nacional de Migración dijeron a los repatriados: “En México son libres, no están detenidos, pero no deben salir”. 

A bordo de cuatro autobuses con escolta de la Guardia Nacional y la secretaría de Marina los repatriados arribaron al antiguo estadio municipal, el cual fue habilitado como Centro de Atención a Migrantes, donde permanecerán dos días para organizar su traslado hacia sus lugares de origen o ellos indiquen en México.
A los 141 hombres y dos mujeres se les pidió no abandonar las instalaciones por su seguridad y a fin de poder prestarles atención.
El perímetro del estadio municipal es vigilado por elementos de la Guardia Nacional.
Fueron informados que el desayuno se servirá a las siete de la mañana, a la una la comida y entre 7 y 8 de la tarde la cena a cargo, de elementos del Ejército Mexicano.
Les indicaron en donde se encontraban los baños y dieron otras instrucciones. Se repartieron en las colchonetas y cobertores ya tendidas, dejando sus mochilas y pequeñas maletas en las cuales cargaban poca ropa y su tristeza.
Arrastraban los pies cansados, la tristeza evidente en el rostro.
Pese a las palabras amables del personal de diversas dependencias no tenían ganas de sonreír. Apenas un “gracias” entre dientes. Atrás dejaban el sueño americano ahora tendrían la pesadilla.
Mañana, tras el desayuno los migrantes serán informados sobre los programas a los cuales pueden acogerse para ser apoyados. Deberán indicar a donde quieren ser retornados.
Personal del INM estimó que en este Centro de Atención a Migrantes se podrán recibir un promedio de 200 deportados diariamente.

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