Por Alfredo Guevara
En los primeros tres años de este gobierno, a la deuda pública heredada por la anterior administración estatal, de 16 mil millones de pesos, se ha logrado amortizar por lo menos 700 millones, en espera de que en el 2026 se abone otros 250, confió Carlos Irán Ramírez González.
El titular de la Secretaría de Finanzas, dijo que el abono dependerá de cómo se encuentre la tasa de interés anual (TIA), y prevalezca en el mercado, para estar en condiciones de amortizar entre 225 y 250 millones de pesos a la deuda pública.
Y es que, cuando la TIA va a la baja, expuso que es momento de hacer los movimientos financieros para aún así, lograr reducir más los intereses que la deuda pública que heredó la anterior administración estatal, representa para el Estado de Tamaulipas.
“En ese sentido hemos venido trabajando al principio de esta administración, teniendo unos ahorros y una economía respecto a las tasas de los intereses, recuerden que hace tres años la TIA andaba arriba de diez y el día de hoy permanece en 7.25, así lo estableció el Banco de México en su última sesión”, indicó.
Dependiendo de la tasa de interés y de cómo prevalezca en el mercado en el 2026 será lo que se amortice para el pago de la deuda pública, aunque se estima que podría ser de entre 225 y 250 millones de pesos, sostuvo el titular de Finanzas en el Gobierno del Estado.
Destacó que el manejo escrupuloso del recurso público, el ahorro que se ha tenido por diversos conceptos en la administración estatal, ha permitido que en los tres primeros años de este gobierno se haya amortizado más de 700 millones de pesos.
“Nosotros recibimos una deuda pública de la anterior administración estatal en aproximadamente 16 mil millones de pesos, de tal forma que a la fecha, oscila en 15 mil 150 millones de pesos”, estimó Ramírez González al ser cuestionado por medios de comunicación.
Aseveró que la política de ahorro y gasto eficiente del recurso público implementada en este año, será la misma aunque con otra estrategia más eficaz en el 2026, para esa forma tratar de amortizar lo más que se pueda a la deuda pública del Estado.