Alfredo Guevara
De poco o nada le sirve al Instituto Electoral de Tamaulipas, integrar un catálogo de sujetos sancionados, cada vez que termine un proceso eleccionario.
Así lo ha hecho en las cinco últimas elecciones de gobernador, alcaldes y diputados locales, en las que incorporó a un total de 97 sujetos; mujeres y hombres que violentaron la legislación electoral, en tiempos de precampaña o en campaña como candidatos a esos cargos de elección popular.
Irregularidades por difusión de propaganda gubernamental durante el periodo de campaña, así como uso indebido de recursos públicos y la consecuente transgresión a los principios de imparcialidad, la sanción fue un simple apercibimiento.
Es decir, el Consejo General del Ietam los “amonesto” de manera pública o privada. Bueno, escasamente con una sanción económica.
Y posiblemente lo hizo así, porque la ley no permite mayor severidad, pese a la gravedad de la falta, en algunos procesos, cometida por el ex gobernador FRANCISCO GARCIA CABEZA DE VACA.
La misma o más grave violación a la legislación, la cometieron otros personajes políticos, entre estos, la dos veces candidata del PAN a la presidencia municipal de Nuevo Laredo YALHEEL ABDALA CARMONA.
Tres veces el todavía alcalde de Reynosa CARLOS VÍCTOR PEÑA ORTIZ o bien, el ahora alcalde electo de Río Bravo y ex dirigente perredista MIGUEL ANGEL ALMARAZ MALDONADO. O también la dos veces diputada local, ahora senadora electa de Acción Nacional IMELDA MARGARITA SANMIGUEL.
Lo anterior evidencia, que como candidatos pueden violentar la ley hasta en tres ocasiones, sin que ninguna de ellas ponga en riesgo su aspiración al cargo de elección popular, al fin que el arbitro electoral, cuando mucho lo que impondrá, es una amonestación, cuya diferencia podría ser pública o privada.
Desafortunadamente, los partidos caen en las mismas conductas al permitir en algunos casos, que sus candidatos sean omisos en no cumplir lo que establece la legislación electoral y por ello, han sido víctimas de amonestación por culpa in vigilando.
Podemos decimos, para qué quiere el Ietam un catálogo de sujetos sancionados en cada elección, si las penas por difusión de propaganda gubernamental, uso indebido de recursos públicos y transgresión a los principios de imparcialidad, entre otras, terminan en una simple amonestación. Afortunadamente, todo parece indicar que, en cuestión de meses, habrá borrón y cuenta nueva. En fin.