Por Alfredo Guevara
La mayor extracción de agua que registra la cuenca del río Guayalejo – Tamesí, es por parte de ganaderos y agricultores, los que si bien pudieran contar con autorizaciones por parte de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), “el problema es cuando abusan de la concesión y toman de más, consideró Francisco González Casanova.
El gerente de la Comisión Municipal de Agua Potable y Alcantarillado en la zona conurbada de Tampico, Madero y Altamira, confirmó que los puntos de extracción ilegal de agua, están ubicados a lo largo y ancho de la cuenca, lo que genera una afectación que se refleja en el sistema lagunario del sur.
Son ranchos ganaderos y sembradíos principalmente, los que no cuentan con los permisos o concesiones por parte de la Conagua y ello ocasiona un grave problema en la zona sur, como lo fue la crisis hídrica del 2024, cuando los niveles de almacenamiento del sistema lagunario, bajaron a lo más mínimo.
“La afectación en metros cúbicos para el suministro es difícil de calcular por la volumetría que tiene el sistema lagunario del sur, la cuenca del río Guayalejo – Tamesí son mas de 45 mil hectáreas, pero definitivamente son las extracciones más grandes que tenemos de agua”, sostuvo el gerente de la Comapa.
Afortunadamente, señaló que la Conagua y la Secretaría de Recursos Hidráulicos del Gobierno del Estado realizan operativos a lo largo de la cuenca, además de ríos, arroyos donde pudiera haber extracciones ilegales o robo de agua por quienes no cuentan con permisos o concesiones.
“Son para el sector agrícola y no se tiene ningún problema en un equilibrio en donde los concesionarios de la Conagua, los agricultores y ganaderos que si tienen concesiones en que consuman las cantidades que se les tiene permitidas, el problema es las extracciones ilegales o cuando abusan de la concesión y toman de más”, sostuvo.
Reveló que desde el 2024 se han estado realizando supervisiones en campo para sancionar a las personas que están afectando enormemente en la captación del agua en la zona sur, donde lo que se quiere, es no volver a enfrentar un problema como el que se tuvo en el año pasado, que afortunadamente se solucionó con la tormenta tropical Alberto.
Corresponderá a la Comisión Nacional del Agua y Recursos Hidráulicos detectar las tomas clandestinas para la extracción del liquido y por ende, imponer una sanción a las personas que usan el agua en forma desmedida o sin permiso a lo largo de la cuenca del río Guayalejo- Tamesí.