Por Alfredo Guevara
Los alcances, objetivos y metas cumplidas de los programas implementados por los entes del Gobierno del Estado y ayuntamientos, los evidenciará la Auditoría Superior del Estado (ASE), al hacer entrega al Congreso local un segundo informe de desempeño y fiscalización.
Se trata de nueve informes de desempeño, 15 de entes de Gobierno y diez de municipios, que revelan los alcances que tuvieron los programas con el recurso que recibieron, además de una fiscalización del uso correcto en la aplicación del presupuesto, adelantó Francisco Noriega Orozco, titular de la Auditoría Superior.
Destacó que los resultados que se darán a conocer el día ultimo de octubre al Congreso local, muestran el nuevo rostro de la Auditoría, es decir, una revisión bajo lupa que viene a provocar el orden y la disciplina financiera entre los entes del gobierno y los municipios.
“Y es que, en temas de disciplina financiera, de orden y control interno había mucho relajamiento, al grado de que pareciera que jugaban con la Auditoría al entregar en partes, primero una cosa y luego otra, cuando desde un principio se debe aportar toda la información, pero todo ese relajamiento quedó atrás”, explicó.
Dijo que se trata de dos tipos de auditoría, la primera que mide cómo fue el alcance de los objetivos de los programas, tomándose en cuenta que el egreso (lo que se gasta) va enfocado al apoyo de los programas que las diferentes secretarías o municipios ejecutan sus recursos.
La otra medición es la fiscalización, en otras palabras, el uso correcto del recurso, del erario estatal y municipal, donde por primera ocasión hay reintegros por parte de algunos ayuntamientos que al no poder solventar las observaciones hechas por la Auditoría Superior del Estado, reintegraron el dinero.
“Ese es un tema, una variable nueva, de entrada hay un par de ayuntamientos que ya reintegraron una parte de recursos, porque llega un momento en el que no pueden solventar las observaciones”, indicó
En forma precisa, los municipios no tienen oportunidad de anexar comprobaciones y se ven obligados a reintegrar lo que simple y sencillamente no pueden comprobar o solventar.