Por Alfredo Guevara
Casi 180 mil formatos de credencial de elector, que con anticipación fueron retirados de los módulos del Registro Federal de Electores (RFE), sobre todo por canje, quedaron hechos polvo, producto de un proceso de trituración mecánica.
El vocal de la dependencia José de Jesús Arredondo Cortes comentó que se trata de credenciales de elector retiradas por pérdida de vigencia o cambios de domicilio, que al momento de canjear la anterior (vencida) por la actualizada, se les realiza un corte en los módulos para que quede inhabilitada.
Después del retiro de los formatos en los módulos y antes de la destrucción, personal del Registro realiza una rigurosa verificación del 20 por ciento de las credenciales para asegurar su correcta destrucción, ante la presencia de representantes de partidos políticos.
“Aproximadamente 33 mil credenciales fueron leídas y ya corroboradas de que, efectivamente, cada una de estas credenciales ya fueron inicialmente leídas en las comisiones distritales de vigilancia y nosotros hicimos una verificación porcentual del 20 por ciento, que equivale precisamente a esa cantidad de credenciales”, indicó.
Comentó Arredondo Cortes que el proceso de verificación se lleva a cabo en cada una de las comisiones distritales y la Junta Local del Instituto Nacional Electoral (INE), garantizando en todo momento la integridad del proceso y la eliminación de cualquier posible duplicidad o irregularidad en el uso de este documento.
Cada una de las casi 180 mil credenciales de elector, al estar vencidas o bien, ser objeto de una actualización de datos del titular, se inutilizaron al realizarse un corto en la fotografía del titular, garantizando con ello que la mica quede inservible.
“Todos esos formatos se ingresaron a la máquina trituradora que se dispone en las instalaciones del INE, y los residuos que se obtuvieron de este proceso, son enviados a una entidad especializada en el reciclaje de ese material”, apuntó.
Aunque el número de formatos de credencial varía cada año, en esta ocasión el número de micas disminuyó en forma importante, comparativamente con la destrucción realizada en el 2023.