Por Alfredo Guevara

Muchos de los edificios históricos del siglo pasado en condiciones vulnerables empiezan a venirse abajo en diferentes municipios de la entidad, producto de la falta de conservación o mantenimiento en su estructura, clima, además de precipitaciones pluviales.

Antes de que se siga deteriorando el legado histórico y cultural de esas y otras poblaciones, es importante que los alcaldes que entran en funciones a partir del uno de octubre, den vida al Instituto de Rehabilitación del Patrimonio y Conservación Internacional, propuso Olga Aurora Méndez Hernández.

La representante del Comité Internacional de Monumentos y Sitios “A” Unesco en Tamaulipas admitió que en la mayor parte de los municipios del Estado existe un legado en infraestructura en condiciones de vulnerabilidad, que en algunos casos se ha derrumbado por la falta de mantenimiento a sus fachadas o estructura con el paso del tiempo.

Aparte de ello, hay otros que se ubican en lugares como Cruillas, San Carlos y San Nicolás en los que no hay acciones de los ayuntamientos encaminadas al rescate del patrimonio, sobre todo porque se trata de pueblos mineros en los que existen vestigios de ruta de la plata, que hasta los pueden convertir en pueblos mágicos.

Consideró que hay otros lugares como Magiscatzin, en González, que pese a ser un lugar con tradición e historia, poco se le conoce de su origen, cultura y legado histórico.

Dijo que si bien algunas instituciones pueden ir al rescate de centros históricos, en donde se reciclan la vivienda, también debe haber respeto a las construcciones adyacentes, para que la nueva edificación cuente con permisos, sean vanguardistas y respeten los lineamientos de construcción.

Méndez Herrera desconoció a ciencia cierta la cantidad de sitios y monumentos históricos que se encuentran en deterioro en el Estado.

Sin embargo, expuso que la mayoría empieza a perder su legado como resultado del paso del tiempo, las condiciones del clima, la falta de mantenimiento y conservación de fachada, interior e incluso, de su estructura, que en algunos casos es de madera.

Confió en que los nuevos ayuntamientos den vida a la creación del Instituto de Rehabilitación del Patrimonio y Conservación, para que no se pierda ese legado histórico y cultural que permanece, pese al deterioro con el paso del tiempo.

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